O San Valentín bendito,
Tú que dedicaste tu vida al amor y a la fe,
Escucha las plegarias de los que hoy te invocan.
Tú que has bendecido las uniones sinceras,
Tú que has protegido los corazones enamorados y consolado las almas heridas,
Intercede por nosotros ante el Señor,
Para que el amor guíe nuestros pasos e ilumine nuestras vidas.
Accede a las parejas fidelidad y ternura,
A las almas solitarias esperanza y paciencia,
A los corazones heridos consuelo y paz.
Enseñanos a amar sin miedo,
A perdonar sin restricciones,
Y a dar sin esperar nada a cambio,
Pues el verdadero amor es un reflejo del Amor Divino.
San Valentín, vela por nuestros corazones,
Distribuye tu bendición sobre los que se aman,
Y guíanos por el camino del amor verdadero y duradero.
Amén.